Golpe brutal e inolvidable el que recibo hoy al no dejarme participar y asistir a la fiesta de cumpleaños de mi propio hijo.
Una fiesta que se planeó en conjunto y que de un momento a otro fui excluido por motivos tan sucios que prefiero dejar de lado; aunque mi amado cumplió años el 21 de octubre y lo festejamos juntos, yo no cerré las puertas a nadie en ese día, cada quien atendió sus prioridades.
Yo pude haber hecho una fiesta a mi hijo también, más no quise conflictuarlo con la aucensia de su mamá y tampoco excluirla a ella porque esas acciones son cosas que no se olvidan, que duelen toda la vida.
Una vez más les afirmo que yo soy sin lugar a dudas la persona que mi hijo más ama en la vida y quien también más Amor le ha dado a el. Este golpe no es solo para mí, sino para el, que como todo niño anhela también compartir con su papá su fiesta de los personajes con los que juega todos los días con el y que su papá le enseñó. Escucharlo todavía ayer hacer planes conmigo sobre cómo jugaríamos juntos en su fiesta o de que nos disfrazaríamos me parte el alma. Me parte el alma saber que me estará esperando todo el tiempo y que no se va a explicar porque su papá no está con el. Es un golpe terrible a sus sentimientos y devastador para los míos.
Una vez más en esta historia recibimos mal por bien, una maldad injustificada e innecesaria, un egoísmo que lastima y hace daño.
Una vez más me levantaré y seguiré luchando porque papá no se rinde; se que Dios me va a dar la oportunidad de tener la seguridad de que estás cosas no sigan sucediendo y demostrar que el poder lo da Dios y lo da para hacer bien y edificar, jamás para hacer mal o destruir.
Siempre he dicho que l@s tiran@s hacen daño en su momento pero todos y cada uno caen, jamás ha existido uno que se libre de la justicia de Dios. Ese Dios del que ellos mismos hablan y tienen en la boca pero no lo conocen, ni creen en el, porque si creyeran no se comportarían así, ya lo dijo nuestro padre "por los frutos conocerán el árbol".
Hoy si me lastimaron pero a los pies de mi padre retomo fuerza y es lo que me levanta una y otra vez. Dios con nosotros.
GM

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