Neosalinazo
- Advertencia autoritaria
- Golpe al panismo
- Resistencia sindical

Astillero Exprés
Julio Astillero

No fue ni remotamente un acto justiciero, sino un calculado ajuste de cuentas. Muchos de quienes hoy se ceban sobra la Elba caída podrían ser objeto de acusaciones parecidas en cuanto a enriquecimientos y trapacerías financieras. /

Pero el golpe contra la cacica es una advertencia de lo que puede suceder a quienes se opongan a los trazos de reformismo que ha hecho el peñismo-salinismo. Es una ofrenda escandalosa ante el altar del rediseño que necesita el “nuevo” PRI, una advertencia despiadada para los miembros del Cártel del Poder Restaurado (Michael Corleone recibiendo besos de reconocimiento y aceptación de mando en el dorso de la mano de parte de los miembros de su bando, luego de la matanza de adversarios) y un mensaje hacia los opositores a las reformas en curso, tanto en materia de telecomunicaciones (donde el priismo pretende reasumir la rectoría política sustraída durante décadas por los antiguos soldados electrónicos del poder que ahora se consideran generales, pero sin dañarlos, dándoles negocios compensatorios a unos, como Azcárraga y Salinas Pliego, y participación a otro, como Slim) como en el tema de los energéticos (la mano de Durillo Karam puede alcanzar a cualquier disidente por cualquier causa)./

La manipulación de la “justicia” por razones políticas es parecida a la que Calderón practicó, por ejemplo, en Michoacán, solo que ahora no se dirige a presuntos implicados en asuntos de delincuencia organizada extraoficial, sino a partícipes de esa delincuencia oficial u oficialista. Los héroes jurídicos de la historieta de la niña Paulette y su colchón asesino son reivindicados y asumen papeles justicieros: el fatídico licenciado Bazbaz fue colocado en la dirección de la unidad de inteligencia financiera de la secretaría de Hacienda y desde allí entrega al jefe sus acostumbrados buenos reportes: no en el hueco de una cama sino en los entresijos del sistema ha encontrado Bazbaz el cadáver político que necesita lucir el ocupante de Los Pinos para consolidar el control del vecindario. El sucesor de Bazbaz, Alfredo Castillo, ahora funge como subprocurador y plantea las hipótesis delictivas del gordillismo con la misma solemnidad que defendió el insólito guión de la niña que nadie encontraba en una parte de su cama porque no se les había ocurrido en días, y con una enorme presión social encima, hurgar en el mueble encubridor.

Sin embargo, el guión mediático tan rápida como enjundiosamente desarrollado en pantallas y micrófonos de los medios aliados al peñismo, y el manejo político del asunto, muestran que Los Pinos quiso frenar de golpe los planes de resistencia activa que la indefendible Elba Esther pretendía hacer aprobar en una reunión de consejo nacional del SNTE que ya tenía en Guadalajara a dirigentes seccionales de todo el país y a la dirigencia formal del sindicato en un consejo nacional extraordinario del que habría de salir un llamado a movilizaciones, a paros, a protesta creciente.
El golpe también va contra el panismo que en doce años vivió un amasiato impúdico con la gran cacica, protectora de Fox y aliada de Marta Sahagún (un hijo de ésta es diputado federal por decisión de EEGordillo a través del Panal), e implacable cobradora de deudas electorales con el chantajeado Calderón que le entregó cargos federales para el saqueo y para la consolidación caciquil.

Es indefendible Gordillo, como se dijo líneas arriba, pero ello no descalifica la resistencia sindical que han desplegado ya algunas secciones contrarias al propio elbismo. Está por verse, además, si la estructura específica del SNTE gordillista será desmantelada y avasallada por el golpe contra la dirigente o si, por el contrario, esto agudiza el sentido de defensa del gremio y acaba uniendo a “independientes” y “oficialistas” frente al autoritarismo peñista y la voracidad de empresarios televisos que están puestos para entrar De panzazo al negocio de la privatización educativa.

Por lo pronto, hoy duerme Gordillo en una cárcel. Neosalinazo ya no en busca de la legitimidad de facto que por lo pronto le dio el Pacto por México, sino de la instauración abierta de un autoritarismo que anuncia que buscará arrasar a quienes se opongan a sus trazos de “modernismo” cavernícola.

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